Todos los que hemos creido somos responsables de llevar este mensaje del amor de Dios.
La primera lectura afirma que “el Señor es el único Dios…; no hay otro”. Nuestro Dios es muy cercano, nos acompaña, nos conduce, aunque no lo vemos sentimos su presencia. Dios siempre viene a nuestro encuentro, se nos aproxima. Nos propone un pacto, una alianza. Dios busca el diálogo y la comunicación con nosotros.
Jesús se refería a Dios como “papá”. La Buena noticia consiste en que esa relación de Dios (Padre) con Jesús (Hijo) se abre para todos nosotros. Jesús nos invita a ser de su familia perfeccionando nuestra forma de ser por medio de su amor (Espíritu Santo). El amor siempre tiende a compartirse, a comunicarse.
El Evangelio nos recuerda que todos los que hemos creído somos responsables de llevar este mensaje del amor de Dios. Llevemos en nuestro corazón la voz de Dios que invita a todo el mundo a conocerlo, a encontrarse con Él por medio de Jesucristo, su Hijo. Anunciemos que Dios es cercano, Jesús está con nosotros “hasta el fin del mundo”.
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