La palabra de Jesús nos libra del mal
Los profetas del pueblo de Dios eran -y todavía son hoy- aquellos que hablan en nombre de Dios, que anuncian su mensaje y denuncian las injusticias humanas. Ellos interpretan su voluntad con autoridad y dirigen al pueblo hacia Dios. Son personas sensibles a su realidad histórica y viven comprometidas con su fe.
San marcos conecta aquel anuncio del profeta que continuará la misión de Moisés con Jesús. Enseñaba con autoridad, anunciaba con palabras y obras un mensaje de esperanza para los as humildes y marginados. Los enfermos sienten muy profundamente cómo la enfermedad los incapacita. Hay cosas que quieren hacer, pero no pueden; es como si no fueran cabalmente humanos. Y Jesús les restituye su dignidad, los libera de la maldad y le devuelve la esperanza.
Como creyentes, también estamos llamados a anunciar y llevar un mensaje de esperanza, con el ejemplo de nuestra vida. Aunque no es fácil porque las críticas y prejuicios muchas veces nos detienen en el ejercicio de esta misión de anunciar la Buena noticia de Jesús.
P. Tarcisio
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